La dermatitis atópica es un tipo de eccema; una dolencia que causa picor en la piel y enrojecimiento de la misma. Es crónica y se manifiesta con frecuencia en época infantil. También es frecuente que se asocie a otras dolencias como la fiebre del heno y el asma. No existe una solución para curar definitivamente la dermatitis atópica, pero pueden combatirse sus síntomas de forma muy eficaz. Es conveniente tener siempre hidratada la piel.
Causas de la dermatitis atópica – Variación genética
Las causas de esta dolencia hay que buscarlas en factores genéticos y en concreto en una variación que reduce la acción defensiva de la piel ante todo tipo de agresiones bacterianas o alérgicas. La piel queda indefensa y no responde adecuadamente ante ataques bacterianos, alergias alimentarias o elementos irritantes que se encuentran en el ambiente.
Síntomas de la dermatitis atópica – Picor, enrojecimiento y sequedad
Hay signos claros de la dermatitis atópica, aunque en cada paciente podemos encontrar diferencias importantes. Los síntomas más usuales son:
Sequedad de la piel.
- Picor.
- Enrojecimiento de la piel.
- Manchas que pueden variar del color rojo al marrón.
- Pequeños bultos que pueden perder líquido y cubrirse con una costras si se rascan.
- Piel engrosada, escamosa o agrietada.
- Piel en carne viva.
Los síntomas se pueden complicar:
- Por ser la dermatitis atópica una manifestación de la rinitis alérgica o fiebre del heno.
- Picazón y descamación crónica de la piel (neurodermatitis)
- Infecciones de la piel.
- Desarrollo de dermatitis irritativa de las manos y que afecta a personas que tienen las manos húmedas con frecuencia o están expuestas a jabones, detergentes o desinfectantes fuertes.
- Desarrollo de dermatitis alérgica de contacto.
- Mala calidad del sueño.
Diagnóstico de la dermatitis atópica – Una exploración física es suficiente
El médico tiene suficiente con un examen físico para detectar la existencia de eccema. Solo recurre a otro tipo de análisis si cree que la dermatitis atópica puede estar asociada a otras patologías.
Tratamiento y medicación de la dermatitis atómica – Tratamiento de larga duración
La dermatitis atópica es una dolencia de largo recorrido. Suele aparecer antes de los cinco años y puede llegar a la edad adulta. A veces es necesario aplicar diversos tratamientos durante años y nunca existe la certeza de saber que no volverá a aparecer. Lo más conveniente es tener la piel hidratada porque consigue reducir los síntomas. Hay también distintos tratamientos recomendados:
- Aplicación de cremas con corticoesteroides.
- Uso de cremas antibióticas.
- Antiinflamatorios.
- Fototerapia.
Prevención de la dermatitis atópica – Hábitos saludables
Aunque su aparición es inevitable porque el principal factor de riesgo es el hereditario, existen algunos hábitos que ayudan a prevenir algunos ataques.
- Hidratar la piel con frecuencia mediante la ingesta de agua y la aplicación de cremas.
- Evitar el uso de jabones fuertes.
- Evitar el estrés.
- No exponerse al polvo.
- No usar agua muy caliente al ducharse y no alargar el momento de las duchas.
- Secarse con cuidado y por completo. No dejar zonas húmedas en la piel.
- Intentar no rascarse en las zonas afectadas.
Fuente: Reportaje publicado por La Vanguardia